La estrategia representa el arte de ver una nueva – y mejor – posición para la empresa/producto y de aplicar las actividades para lograr los objetivos establecidos, incluso ante las dificultades existentes. Este proceso se lleva a cabo por fases.

Tras el diagnóstico situacional, se realiza un análisis de los factores críticos de éxito, análisis del entorno externo (mediante la identificación de stakeholders) y la elaboración de escenarios. Posteriormente se realiza un análisis del entorno interno. Como siguiente paso, se estudia la relación entre el entorno interno y externo a través de la matriz SWOT. Como resultado de todo este análisis, se desarrolla la implementación de la estrategia y un sistema de evaluación de resultados. La etapa táctica consiste en ejecutar, monitorear y analizar los resultados.

La planificación comprende el desarrollo de un análisis SWOT, el viaje de acceso del paciente, la orientación a los clientes, el posicionamiento de la tecnología en el mercado, la evaluación de los mensajes de valor de la tecnología y, finalmente, las actividades tácticas en el campo.